martes, 16 de diciembre de 2014

Tarta para Beltrán

Hola!!

Hoy no os traigo receta, os traigo unas fotos para que veais la tarta con la que Beltrán celebró su primer cumpleaños.

Su madre se puso en contacto conmigo para pedirme una tarta de temática 'pirata'. Hace algún tiempo ya había hecho una similar, pero para niño más mayor, por lo que esta tiene algunas diferencias.

La principal diferencia es que la propia tarta es más pequeña. Las tartas pequeñas me gustan especialmente, porque no necesitan un montón de cosas encima para parecer 'llenas', sino que vale con un diseño sencillo.

Además, el propio pirata es diferente. En este caso he tratado de darle un aspecto un poco más 'infantil' y dulce, para que la tarta vaya más acorde con el cumpleaños de un bebé.

La tarta está compuesta por un bizcocho de vainilla y relleno de fresa y crema de mandarina.

Espero que os guste!!





viernes, 5 de diciembre de 2014

Rollos rellenos de pasta filo

Hola!

Hoy os traigo una receta salada muy sencilla de hacer pero diferente, que espero que os guste. La base principal es la pasta filo, que me gusta mucho y creo que está poco utilizada en territorio patrio, para los buenos resultados que da. El relleno lo he hecho en base a mis gustos, claro, y os lo recomiendo encarecidamente, pero podeis experimentar con otros.

Rollos de pasta filo con queso, serrano y trigueros



Para hacer esta receta utilicé el queso de oveja añejo que me envió Quesería la Antigua de Fuentesaúco. El tipo de queso que utiliceis, como es natural, dará sabor más o menos fuerte a la combinación.

Para hacer estos rollos rápidos necesitareis:
  • Un paquete de pasta filo (si nunca la habeis comprado/visto, la venden en refrigerados, junto al hojaldre y la pasta brisa).
  • Un paquete de espárragos trigueros
  • Jamón serrano
  • Queso de oveja
En primer lugar, en una sartén con un chorrito de aceite, pasamos ligeramente los trigueros. Después, cogemos una lámina de pasta filo (vereis que son finísimas y bastante grandes, así que si no poneis excesivo relleno, os llegará una sola hoja para cada uno). En el centro disponemos el jamón serrano, encima los trigueros y, por último, el queso cortado en tiras o tacos.



Para cerrarlo, teneis dos opciones. Podeis cerrarlos como los burritos, enrollando el relleno en la pasta y cerrando los laterales o podeis cerrarla en triángulo, enrollando el relleno desde una esquina de la pasta y después derrando. Lo fundamental es que quede como un paquetito.

Una vez cerrada la pasta filo, poneis un poquito de aceite en una sartén y pasais los rollos por los dos lados a fuego lento. La idea es que, además de dorar la parte de fuera, pueda calentarse lo suficiente la parte de dentro. Si lo preferís, también pueden hacerse al horno, introduciéndolos hasta que el exterior esté dorado.



Y listo! espero que os interese y lo probéis! 

Besos!


miércoles, 26 de noviembre de 2014

Galletas de jengibre

Hola!

Os traigo por aquí una receta muy navideña, aunque para mi son casi las galletas que mejor representan el otoño en general, la llegada del frío, las tardes más cortas, las chimeneas encendidas... allá vamos!

Galletas de jengibre



Como cada maestrillo tiene su librillo, supongo que mundo adelante habrá un montón de recetas de galletas de jengibre. Yo he escogido esta en base a la receta de galletas de mantequilla, de modo que se pueden utilizar para decorar con glasa o fondant para halloween o Navidad. 

Además, esta en concreto es una receta de galletas de jengibre bastante suave, adaptada al paladar patrio. Si os gustan más especiadas (a mi también, que conste) podeis incrementar la proporción de especias e incluso añadir otras nuevas. La cocina huele que es una maravilla!



Ingredientes:
  • 250 gramos de harina
  • 150 gramos de mantequilla
  • 100 gramos de azúcar moreno
  • Una cucharadita de levadura química
  • Una cucharadita de canela en polvo
  • Una cucharadita de jengibre en polvo
  • Una pizca de nuez moscada molida
  • Sal
  • Un huevo mediano
Para prepararlas utilizo el mismo orden que en el caso de las galletas de mantequilla. Ponemos la mantequilla a temperatura ambiente y el azúcar moreno en una batidora y batimos hasta que haga una pasta marrón y homogénea (no lo será tanto como en el caso del azúcar blanco). Mientras, en un bol aparte, mezclamos la harina, la sal, la levadura, la canela, el jengibre y la nuez moscada.


A la mezcla de mantequilla y azúcar añadimos el huevo y continuamos mezclando hasta que se integre. A continuación, vamos incorporando y mezclando, poco a poco, la parte seca --harina-sal-especias-levadura--. 
Cuando esté todo integrado, envolvemos la masa en un film transparente y la metemos a enfriar en la nevera entre media hora y una hora. La idea es que la masa, que es más pegajosa que la de mantequilla tradicional, se endurezca un poco y nos permita trabajar con ella. Al sacarla, habrá que amasarla un poco con las manos para hacerla manejable y que no cuartee.

Con un rodillo estiramos la masa en el grosor deseado. Yo utilizo un rodillo con guías para que sea toda del mismo grosor y no las chamusquemos por partes en el horno, pero os servirá si utilizais un rodillo normal sobre dos listones, por ejemplo.

Cortamos las formas que queramos con cortapastas y las metemos en el horno ya caliente a 170 gramos --más o menos--. Las galletas estarán después de entre 12 y 15 minutos de horno, sin llegar a tostarse.


Espero que estos últimos meses del año tengais la oportunidad e hacerlas y las disfruteis mucho. 

Besos!!


viernes, 6 de junio de 2014

Magdalenas integrales con semillas de amapola

Para los que acostumbrais a desayunar bollería --y quereis desterrar la bollería industrial--, esta es una receta de magdalenas un poquito más sanas, con las que podréis disfrutar sin remordimientos. Tienen un sabor estupendo, menos azúcar y harina integral. Además, les he añadido un toque de azahar que les queda estupendo!



La receta original es del libro 'Magdalenas', de Xavier Barriga.

Para unas 12 magdalenas necesitareis:
  • 3 huevos
  • 175 gramos de azúcar moreno
  • 60 gramos de leche
  • 190 gramos de aceite (yo utilicé girasol)
  • 210 gramos de harina integral
  • 10 gramos de levadura química
  • Una pizca de sal
  • Ralladura de limón
  • Esencia de azahar
  • Semillas de amapola
Para empezar, mezclamos el huevo y el azúcar moreno hasta que estén bien integrados. Incorporamos, mientras seguimos batiendo, la leche, la esencia y el aceite. A continuación, y en varias partes, incorporamos la mezcla de harina, sal, levadura y ralladura de limón.



Mezclamos hasta que todo esté completamente integrado y después dejamos reposar la mezcla en la nevera, tapado con un paño, una hora. Antes de repartir la mezcla entre los moldes, volvemos a batir ligeramente la mezcla. Por encima, espolvoreamos un poco de azúcar moreno y semillas de amapola.

Se hornean a 200 grados durante 15/20 minutos.

Espero que las hagáis y os encanten. Podeis contarme vuestra experiencia!




martes, 3 de junio de 2014

Cumple de caperucita

Hola!

Hace algunas semanas fue el cumple de mi sobrina Ánxela, que hacía tres años.

Para el día de la celebración, su mamá me pidió que hiciese una tarta para los niños, y unas galletas para repartir en el cole.

Después de darle algunas vueltas, decidimos que la temática de las dos cosas sería Caperucita Roja, que hay que aprovechar que la niña todavía no pide dibujos horteras (por poco tiempo).

Hoy os traigo una muestra de la tarta y de las galletas para que veais como quedaron. A los niños la tarta de cumple les encantó, espero que a vosotros también!







miércoles, 5 de marzo de 2014

Carnaval: Hojas de limón

Hola!!

Recién acabados los carnavales, hoy os traigo mi receta 'carnavalesca' de este año, para los que no las conozcais o los que si y tengais ganas de 'reconocerlas'.

Este año por fin me he decidido a hacer en el carnaval hojas de limón, que en otros puntos de España se conocen como 'paparajotes'.


Antes de nada, voy a explicar un poco los motivos. Soy una enamorada de las novelas de Almudena Grandes. Cada vez que una de sus novelas cae en mis manos, la devoro en cuestión de horas. Es difícil explicar el motivo, sólo que me encantan.

Pues bien, hace algunos años lei la novela 'Inés y la alegría', primera entrega de lo que pretende ser una serie de historias ambientadas en la guerra civil española y la posguerra. La novela es tan bonita como 'El corazón helado', claro, pero además tiene la característica de que Inés, su protagonista, sale adelante en el exilio de la posguerra a través de la cocina, primero para los comunistas españoles en España y, después, como cocinera en Bosost.

Una de las cosas que más me gustaron del desarrollo de la novela son, precisamente, los paparajotes que Inés prepara para los soldados comunistas, en un 'campamento' aquejado de falta de todo tipo de alimentos.



Para mi, los paparajotes eran en ese momento totales desconocidos, pero a raíz de la novela, y preguntando sólo un poco, se da la circunstancia de que las 'hojas de limón' son también un postre tradicional del carnaval gallego.

Pues bien, aunque mi idea nació en 'Inés y la Alegría', la he traído hasta la tradición gallega adaptando para ello la receta de hojas de limón del libro 'La cocina práctica', de Picadillo, ese libro que todos los gallegos, en mayor o menor medida, tenemos en casa. El mío, además, es un destartalado ejemplar propiedad de mi abuela en su juventud, las recetas tienen que salir bien si o si!

La receta original de Picadillo consta de:
  • Una libra de harina (480gr)
  • Un cuartillo de leche (250 gr)
  • 12 huevos
  • Un poco de ralladura de limón
  • Hojas de limonero limpias
Yo hice una adaptación para 2 huevos y le añadí dos cucharadas soperas de azúcar, para hacer la masa un poco azucarada.



Lo primero que necesitamos es limpiar y secar muy bien las hojas de limonero, cuanto menos tiempo lleven recogidas del árbol mejor.

En un bol, batimos los huevos e incorporamos la leche, la harina y, en mi caso, el azúcar. Removemos bien con unas barillas o una batidora hasta que todo quede integrado.

Ponemos una sartén al fuego con aceite de girasol y, cuando esté caliente (no demasiado, sino se queman con facilidad), cogemos una hoja de limonero, la mojamos en la masa y la freimos por cada lado. Repetimos la operación con todas las hojas.

Durante un rato yo las dejé sobre un papel absorvente para quitarles un poco de aceite. Después se pasan a otra fuente y se espolvorean con azúcar glass.

A la hora de comerlas, separamos la masa de la hoja de limón (que no se come, claro), y ésta le habrá pasado parte de su aroma a limón.

Y hasta aquí mi aventura. Espero que le deis una oportunidad a las hojas de limón o paparajotes, con esta receta o la que esté presente en vuestras casas y me lo conteis! Por cierto, como mejor están es recién hechas!




lunes, 27 de enero de 2014

Pan relleno de Queso de Oveja

Hola!!

Que tal por aquí? he estado un poco desaparecida desde el año pasado :-), pero tengo el propósito de año nuevo de ponerme al día compartiendo las recetas que tengo para vosotros, espero que os gusten y, sobre todo, que las pongais en práctica!

Para empezar, hoy tengo una receta salada con queso de oveja de Quesería la Antigua de Fuentesaúco.

La compañía tuvo la amabilidad de enviarme unas cuñas de sus quesos viejos y añejos de oveja, para que los probase (y a mi, que me encanta el queso, no he tenido mayor problema en hacerlo). He de reconocer que, para mi, la mejor manera de comer un queso como este es así, tal cual, cortado de la cuña y con un buen pan, pero por si quereis cambiar un poco la forma de consumirlo, hoy os voy a proponer un pan dulce relleno de queso de oveja.


Para la masa, que es ligeramente dulce, necesitaremos:
  • 1 kilo de harina normal
  • 500 ml de leche
  • 100 ml de nata
  • 150 gramos de mantequilla
  • Medio cubo de levadura (12,5gr)
  • Una cucharada sopera de sal
  • Dos cucharadas soperas de azúcar
En un recipiente, mezclamos la leche y la nata y la calentamos ligeramente, hasta que no se note fría. Por otra parte, derretimos la mantequilla en una taza.
En otro recipiente, mezclamos la harina, la sal y el azúcar. Deshacemos sobre la harina la levadura. 
A continuación incorporamos la leche+nata y la mantequilla y amasamos. Yo he utilizado la Kitchen Aid, así que el amasado ha sido muy rápido, si lo haceis a mano debeis tener un poco más de paciencia y amasar hasta que quede una masa elástica y que se despegue de los dedos (o de las paredes de la amasadora).


Una vez que la masa esté lista, la dejamos reposar tapada y en algún lugar cálido durante entre hora y media y dos horas, hasta que más o menos doble su volumen. A continuación, la volcamos con cuidado en una superficie con harina y la bajamos con las manos. 
Ahora vamos a formar los bollitos y a rellenarlos. Para rellenarlos he utilizado queso de oveja añejo al romero de Quesería la Antigua Fuentesaúco. Este:


Con un cuchillo vamos cortando trozos de la masa. La aplastamos e introducimos dentro unas tiras de queso cortadas (yo le he puesto bastante, y es un acierto). Luego, cerramos los dos lados de la masa, formando un bollo.




Colocamos la  parte cerrada hacia abajo en una placa de horno sobre papel encerado. Cuando tengamos todos los bollos formados, dejamos levar de nuevo, hasta que vuelva a duplicar su tamaño y la masa se vea firme.

Antes de meter en el horno, pintamos con aceite de oliva y espolvoreamos sal y romero.

En el horno, a 180 grados, deben estar entre 15 y 20 minutos.

Aquí podeis ver el corte de uno de los panecillos. El contraste es francamente bueno, así que os animo a que lo probeis y me conteis que tal, en mi casa les ha encantado!!


Hasta pronto!